Armonización celestial: La historia del himno “Blessed Assurance”

“Blessed Assurance”, himno número 369 del United Methodist Hymnal, es un clásico escrito por Fanny Crosby y Phoebe Palmer Knapp. Foto por Crystal Caviness, Comunicaciones Metodistas Unidas.
“Blessed Assurance”, himno número 369 del United Methodist Hymnal, es un clásico escrito por Fanny Crosby y Phoebe Palmer Knapp. Foto por Crystal Caviness, Comunicaciones Metodistas Unidas.

En una casa de la ciudad de Nueva York, en 1873, Phoebe tocó para su amiga algunos compases de música en el piano, y le preguntó: “¿Qué te dice esta melodía?

La historia cuenta que la amiga le respondió de inmediato: “Bendita seguridad, ¡Jesús es mío! ¡Qué anticipo de la gloria divina!”

Sin mucho esfuerzo y en unos minutos, Fanny Crosby escribió los versos y el estribillo que acompañaría la música escrita por Phoebe Palmer Knapp. Este año 2023, el precioso himno titulado “Blessed Assurance,” (número 369 del United Methodist Hymnal), celebra su 150 aniversario.

Esta colaboración musical fue una de las primeras entre Crosby, una mujer ciega que llegó a ser conocida como una de las escritoras de himnos más prolíficas de la historia, y Knapp, una exitosa compositora e hija de la famosa evangelista de avivamientos, Phoebe Palmer. Crosby y Knapp frecuentaban los mismos círculos musicales de Nueva York, y juntas adoraban en la Iglesia Metodista Episcopal Old John Street.

El nuevo himno fue un éxito casi instantáneo, en lo que respecta a la popularidad de los himnos. En su primer año, fue publicado por tres editoriales distintas.

“Gems of Praise, No. 1 (Methodist Episcopal Book-Room); “Guide to Holiness,” una publicación metodista publicada por Walter y Phoebe Palmer; y “Bible School Songs,” editado por Knapp y J.H. Vincent, según los archivos de HymnologyArchives.com.

En los últimos 150 años, el himno ha sido publicado por comunidades de fe de todo el mundo y ha sido grabado por artistas como Carrie Underwood, Alan Jackson, CeCe Winans, Glen Campbell y Third Day.

Un poco de historia acerca de Fanny Crosby

Crosby nació ciega, pero esto jamás le impidió tener una vida plena. De hecho, muchas veces dijo que su ceguera era una bendición.

“Si mañana me ofrecieran una visión perfecta, no la aceptaría”, dijo. “Quizá no habría cantado himnos de alabanza a Dios, si hubiese sido distraída por las cosas hermosas e interesantes a mi alrededor” (Song Stories: The Stories Behind Worship’s Best Loved Songs, Volume 1).

Crosby tenía 44 años cuando escribió el primer himno de una lista de más de 8,000. En su primer himno colaboró con William B. Bradbury, consumado escritor de himnos. Esta asociación produjo muchas canciones y un contrato de publicaciones con la editorial Biglow y Main. El contrato estipulaba que Crosby escribiera 3 himnos semanales, a $2.00 cada uno. Crosby escribía unos 6 o 7 himnos al día. Sometió tantos himnos a la publicadora, que la editorial le pidió que escribiera bajo un seudónimo para evitar que la gente creyese que Biglow y Main solo publicaba los himnos de Crosby. “Song Stories” informa que sus himnos fueron presentados bajo unos 100 seudónimos.

Un poco de historia acerca de Phoebe Palmer Knapp

Los padres de Knapp eran evangelistas de profesión, así que creció en un hogar lleno de música religiosa. Ella y su madre a menudo colaboraban para escribir himnos. La madre escribiría la letra y la hija la melodía en piano y órgano. Knapp escribió la música de más de 500 himnos.

Es interesante que Phoebe estaba casada con Joseph Fairchild Knapp, quien hizo una fortuna en publicaciones. Además, sirvió como el segundo presidente de Metropolitan Life Insurance Company. La familia Knapp vivía en el Hotel Savoy de la Quinta Avenida, en Nueva York, donde poseían lo que se creía era el órgano más grande del mundo para una residencia privada.

La melodía más dulce que haya oído

En toda la colección de himnos de Crosby y Knapp, no cabe duda de que “Blessed Assurance” fue el que tuvo más éxito.

“Mi querida amiga, la señora Joseph F. Knapp… ha compuesto la melodía que a mi parecer es una de las más dulces que haya oído por mucho tiempo”, escribió Crosby en “Fanny Crosby’s Life Story” (1903). “Me pidió que escribiera la letra, y al juntar la melodía y la letra sentí que el aire y el himno estaban hechos uno para el otro. En los cientos de veces que he escuchado este himno, esta opinión se ha ido confirmando cada vez más”.

Crystal Caviness trabaja en UMC.org, en Comunicaciones Metodistas Unidas. Contáctese por email o llame al 615-742-5138.

 

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